Día 1: Lunes La mente de una persona con Trastorno Bipolar no es baladí, y aún menos los avatares emocionales. Con esta afirmación tampoco quiero justificar mi ausencia o dedicación a la escritura, actividad que por cierto, me satisface. O sea que me reservo las excusas (ya que además, no es propio de mi). Ha transcurrido un año desde la última vez que me asomé a esta ventana, a este rincón o espacio de encuentro entre mis lectores y yo, en donde mayormente transmito las herramientas que me ayudan a convivir con el TB con mayor liviandad, además de los entresijos que ello implica (subidas y bajadas emocionales para la…